Curioseando por la blogosfera, y revisados algunos artículos de opinión que leí hace tiempo, he podido devolver a mi memoria algo que me llamó mucho la atención y me ofuscó bastante en su momento. El sencillo hecho de que algunos no consideran al cómic (o historieta) como parte integrante de la cultura. El que me ofuscara en su momento no significa que no me mosquee en la actualidad, lo que pasa es que ahora me tomo las cosas de otra manera.
A día de hoy, por suerte, está considerado el noveno arte. Y no es para menos. Nunca he sido un ferviente lector de cómics (a pesar de poseer una colección completa de las historias de "El increíble Spiderman", "Daredevil" o "El Capitán América"), he de confesarlo. Siempre he sido más de libros. ¿Un poco clásico? Qué se le va a hacer. Pero el no haber sido lector de historietas habitual no quita que no pueda dejar de pensar en ellas como partes de la cultura.
Desde mi punto de vista, y al igual que las series actuales de televisión, un buen cómic necesita de un guión excepcional, o al menos medianamente bueno (pues como todo, también hay cómics que no merecen la pena ser leídos). De nada servirían los diálogos y el dibujo si no se tiene una buena historia que contar. Una historia firme, sólida, interesante, original (aunque esto de la originalidad, sigo pensando que es cuestión de gustos, pero bueno). Después, el dibujo. El dibujo es el pilar fundamental del cómic. Sin dibujo, no hay proyección narrativa ni hay cómic en sí. Y como todo, es algo que también va a gustos, puesto que a algunos les gusta una tipología muy concreta de dibujos y a otros otra distinta. Finalmente entran en el proceso creativo el colorido y la rotulación. Es necesario anotar,que al igual que en cualquier materia, hay diferentes ramas o subgrupos dentro del mundo del cómic. Hay desde viñetas inglesas, manga (cómic japonés), americano, etc...
El último cómic que leí fue "Capitán América", una continuación de las antiguas aventuras pero más madura, más seria y con ciertos rasgos de novela negra (serie que volveré a retomar en cuanto pueda). Es un regalo del guionista Ed Brubaker (ganador de muchos premios, incluídos los Eisner) y de Steve Epting (el dibujante).
En suma, no pretendo con este post dejar constancia de que soy un gran sabedor en lo que a historietas se refiere (no es mi intención, ilustres sabios del cómic, quede claro), pero sí que me gustaría remarcar que el cómic, sí forma parte de la cultura, que son muchas las personas que contribuyen a crear lo que algunos, incluído yo pensamos: auténticas obras de arte.